Para comprender qué es la procuración de justicia, antes es necesario tener una idea general sobre el concepto de justicia. A lo largo de la historia los pensadores han reflexionado sobre este tema. Como producto de sus esfuerzos, se han dado distintas definiciones de justicia. Para el filósofo griego Aristóteles, la idea de justicia estaba relacionada con el equilibrio entre dos extremos. Por eso, consideraba que la justicia correspondía con el justo medio, lejos de uno y otro extremos.

Por su parte, Ulpiano, estudioso del derecho en la antigua Roma, definió a la justicia como la voluntad constante y permanente o interminable de dar a cada uno lo suyo. Otros pensadores, como Tomás de Aquino y Francisco de Vitoria, consideraban que la justicia era similar a la igualdad.

Cuando se habla de la función de procuración de justicia que debe realizar nuestro Sistema de Justicia Penal, también es necesario precisar en qué sentido se utiliza la palabra justicia y las características y tipos de ésta, como se hace a continuación.

La justicia distributiva se refiere básicamente a una relación entre el individuo y la sociedad; mediante ella se busca la igualdad en la distribución de cargas y obligaciones en la sociedad, pero también que cada persona pueda tener las mismas oportunidades para satisfacer sus necesidades, tales como alimentación, salud y vivienda. La justicia social está relacionada con este tipo de justicia distributiva, porque con ella se persigue disminuir los contrastes sociales y la injusta distribución de la riqueza.

Por su parte, la justicia conmutativa consiste en dar a cada quien lo que le corresponde, atendiendo a sus acciones o a su condición en la relación con otra u otras personas. Por ejemplo, si una persona vende una mercancía, merece que le sea pagada; el comprador, por su parte, al hacer el pago, merece que le sea entregada la mercancía adquirida.

Existe también una clase de justicia llamada justicia legal, que se alcanza aplicando o haciendo valer las leyes que han sido establecidas válidamente para regular o reglamentar la vida en sociedad. Las leyes prevén sanciones para quienes las violan, y la aplicación de dichas sanciones es una forma de justicia. Por ejemplo, si una persona es víctima de un robo, se merece que se castigue a la persona que le robó y que le sea reparado el daño. Esto es justo porque así lo establece la ley. Por su parte, quien cometió el robo, se hace merecedor, también por mandato de la ley, a que se le haga justicia, mediante la aplicación de una sanción o pena.

La justicia penal, es decir, aquélla que imparten los jueces penales al imponer las sanciones previstas por la ley, es un tipo de justicia legal porque, tanto los acusados como los autores de un delito, y las víctimas de éste, se hacen merecedores de distintas consecuencias a partir del estudio de los hechos y de la aplicación de las leyes.

  • Quien comete un robo, un fraude o cualquier otro delito, merece recibir el castigo previsto por la ley penal.

  • Quien fue víctima de un delito, merece que le sea reparado el daño y que se castigue a quien lo ofendió.

  • Quien es inocente, aunque haya sido acusado, merece ser absuelto.