::En Camino::

La asesoría en los círculos de estudio, es el espacio donde confluye todo lo que se realiza a nivel nacional y estatal y por ende donde se agudizan todas nuestras fortalezas y debilidades.

 
Es aquí, donde a través de los asesores que acompañan el proceso educativo de las personas jóvenes y adultas, se debe centrar la atención, acompañamiento y apoyo permanente.
 
Hay aproximadamente 100 mil asesores, desde Tijuana, Baja California hasta Mérida, Yucatán que acompañan el proceso educativo de muchos mexicanos que no han concluido si educación básica, asesores que en muchos casos son formados, otros hacen lo que pueden, siempre con la mejor intención, apoyar, dar, compartir lo que saben.
 
A continuación les presentamos una parte del paquete “Como mejorar mi asesoría” donde se abordan algunos elementos que pensamos pueden favorecer la calidad de la atención educativa en los círculos de estudio.
 
La asesoría en el círculo de estudio es aquélla en la que se reúne e interactúa un grupo de personas con el asesor o asesora para el logro de determinados aprendizajes, combinando el trabajo individual y el colectivo.
 
Los círculos de estudio se reúnen en los puntos de encuentro (escuelas, casas de la cultura, bibliotecas, etcétera), en las plazas comunitarias y, en algunos casos, en los hogares de las personas o de los asesores.
 
En la práctica, es frecuente que en los círculos de estudio las personas estudien de manera individual con su módulo, en silencio y sin interactuar con las demás personas. Por eso te proponemos una estrategia para que desarrolles tu asesoría destinando un tiempo para el estudio o trabajo individual y otro para el aprendizaje colectivo, como se muestra en el siguiente esquema.
 
 
En el esquema anterior, en el momento del estudio individual, se retoman los aspectos que analizamos al revisar la asesoría individual y que es posible aplicar también en el círculo de estudio. En el momento del aprendizaje colectivo, se pueden proponer actividades a realizar en subgrupos y actividades en las que pueda participar todo el grupo.
 
 
En la asesoría las personas deben relacionarse más, platicar, intercambiar sus ideas, ayudarse entre sí, aun cuando lleven diferentes módulos. Es conveniente dar un tiempo para que cada quien trabaje con su módulo y otro tiempo, para realizar activi-dades colectivas.
 
Muchos asesores creen que en los círculos de estudio donde se estudian diferentes módulos no se pueden realizar actividades colectivas, y que, por lo tanto, las personas que participan en ellos deben dedicarse a trabajar individualmente en su módulo, en silencio y sin comunicarse entre sí, pero no es así. ¡En nuestras asesorías sí es posible dedicar un tiempo para el estudio individual y otro para el aprendizaje colectivo!
 
El estudio individual
 
Durante el estudio individual las personas trabajan con su módulo y a los asesores y asesoras nos corresponde apoyar a la persona para que aprenda de manera significativa , como vimos en el tema anterior.
 
Para propiciar el aprendizaje significativo, es importante:
 
Sugerencias
 
 
Orientar a las personas para que trabajen con los diferentes materiales del módulo.  
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Propiciar que se familiaricen con diferentes tipos de texto.
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Favorecer la comprensión de la información.
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Hacer que relacionen la nueva información con lo que ya saben y puedan utilizarla en la vida cotidiana.
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Propiciar su reflexión mediante preguntas.
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Guiar a las personas para que encuentren respuestas ante sus dudas, descubran sus errores y puedan corregirlos.
 
El aprendizaje colectivo
 
Las siguientes sugerencias pueden ser de utilidad para realizar actividades en subgrupo dentro de la asesoría.
 
Sugerencias
 
 
Se puede formar un subgrupo con personas que estudian el mismo módulo para que realicen juntas alguna actividad o comenten algún tema y sus respuestas , favoreciendo con ello el diálogo y la reflexión colectiva, la contrastación de opiniones y conocimientos. También pueden identificar y corregir sus errores o ayudarse a aclarar sus dudas.  
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Otra opción es formar subgrupos con personas que llevan módulos diferentes del mismo eje, y pedirles que comenten un tema común o que realicen las actividades colectivas que se plantean en la mayoría de los módulos del MEVyT, los cuales muchas veces no se realizan porque el asesor no abre espacios para el intercambio grupal.
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En los subgrupos, también pueden realizarse los juegos que vienen en diferentes módulos del MEVyT, con los cuales las personas, además de divertirse, reflexionan y aprenden.
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Se pueden formar subgrupos con personas que saben más de algún tema y otras que tienen menos conocimientos, a fin de que los primeros las ayuden en su proceso de aprendizaje. O bien, entre personas que tienen cierta afinidad por su edad o intereses, por ejemplo, jóvenes con jóvenes o señoras con señoras.
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También se puede reunir a las personas en subgrupos para que comenten entre sí los temas que cada quien está estudiando, qué les parecen y qué han aprendido.
 
Durante las actividades en subgrupos las personas interactúan entre sí, intercambiando sus ideas, experi-encia, conocimientos y confrontándolos con los propios, favoreciendo su aprendizaje significativo. Al asesor o asesora le corresponde prever la manera en que va a integrar los subgrupos y las actividades que van a realizar, para ello se debe tener muy claro el módulo y tema que estudia cada persona.
 
Aportaciones de asesores sobre las actividades colectivas que han desarrollado en su asesoría.
 
 
Una actividad que realizamos fue la lectura del cuento Réquiem con tostadas, que viene en el módulo Ser joven , y comentamos las consecu-encias de la violencia en la familia. Les gustó mucho, aunque es bien triste que pase esto.
Isabel
   
 

En mi grupo realizamos las encuestas de salud que se piden en el módulo Vivamos mejor. Cada quien aplicó cinco cuestiona-rios a sus familiares y vecinos, y luego analizamos la información.

 
 
Claudia
 
 
En mi Círculo las compañeras que estudiaban el tema del vih-sida prepararon una plática, les salió tan bien que luego se hizo otra vez, pero con la participación de personas de nuestra comunidad.
José
   
 

Nosotros utilizamos los juegos que vienen en los módulos del MEVyT para propiciar la participación del grupo, uno que ha gustado mucho es el Ecojuego.

 
 
Refugio
 
Sugerencias
 
 
En los módulos del MEVyT hay muchos temas que pueden servir de base para generar la discusión, es decir, el intercambio de ideas y la reflexión grupal, aun cuando las personas lleven diferentes módulos.
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Antes de comentar o discutir un tema en grupo, es necesario revisar la información que viene en los módulos, retomar algunas de las preguntas o actividades que se plantean en el libro para propiciar la reflexión, es importante procurar que todos participen. Y algo esencial: ¡no debemos imponer nuestras ideas! Es mejor conducir la discusión a la obtención de una pequeña conclusión, de acuerdo con la información que se maneja en el módulo.
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Cuando se promueva la discusión de un tema en el grupo, pueden surgir puntos de vista opuestos y caer en polémica. También puede ocurrir que algunas personas quieran imponer sus ideas. Por eso es importante que al iniciar comenten algunas reglas básicas como: que todos participen, pedir la palabra, escuchar a los demás, no acaparar la palabra, ser respetuosos y tolerantes con las ideas diferentes, no tratar de imponer nuestro punto de vista.
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En otras ocasiones, puede suceder que algunas personas no quieran hablar en grupo de temas relacionados con la sexualidad. En este caso, es conveniente respetar sus creencias o costumbres, motívalas, pero no obligarlas a participar.
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También se pueden prever actividades para los niños a fin de que permitan estudiar a las mamás.
 

Durante el aprendizaje colectivo, las personas del círculo de estudio interactúan entre sí para el logro de determinados aprendizajes, aun cuando estudien módulos diferentes.

Para ello es importante que el asesor:

 
Prevea la actividad que se van a desarrollar en la asesoría.
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Coordine su realización.
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Propicie la participación de todos los integrantes.
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Guíe al grupo para la obtención de conclusiones y la aplicación de lo aprendido.

De esta forma, el círculo de estudio se convierte en un espacio educativo en el que las personas se relacionan y comunican entre sí, aprenden por cuenta propia al estudiar con su módulo, enriquecen y construyen o reconstruyen sus conocimientos con el intercambio de ideas, experiencias, conocimientos y la interacción con las otras personas.

 
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