La depresión es un padecimiento curable, se estima que ocho de cada diez personas con depresión mejoran y regresan a desarrollar sus actividades cotidianas. Una vez que se reconoce ésta, es importante dar el tratamiento adecuado.
   
 

Las personas con depresión deben ser atendidas por un médico especialista que, dependiendo de los síntomas, de la gravedad del caso y de las circunstancias que rodean a la persona, recomendará el tratamiento a seguir, ya sea a través de una psicoterapia (tratamiento hablado), tratamiento con fármacos (antidepresivos) o, incluso, ambos.

La psicoterapia permite a la persona hablar sobre sus sentimientos, poder explorar y confrontar las posibles razones por las que se está deprimido, requiere atención y motivación de un profesionista.
Al hablar de sus sentimientos reales con una persona capacitada que escuche, comprenda y no juzgue, puede ofrecer a la persona alivio considerable.

En caso de ser necesario el uso de fármacos o antidepresivos, sólo el médico puede prescribir el tratamiento adecuado, el cual debe estar bajo supervisión constante, para realizar los ajustes necesarios, de acuerdo con cada paciente.

Ayuda a sí mismo
La ayuda del médico es muy importante, pero igual de importante es la ayuda que la persona se pueda dar y para ello se recomienda:

Si usted ha recibido malas noticias o ha experimentado una situación difícil en su vida, intente contárselo a otras personas cercanas a usted, no se reprima, platique lo que pasó y cómo se siente usted. Esto le permitirá revivir la experiencia dolorosa, le facilitará expresar sus sentimientos, así como la búsqueda de soluciones.

• Salga de casa y dé un paseo o haga ejercicio, esto le ayudará a sentirse físicamente bien y probablemente pueda dormir mejor.

• Mientras no se sienta capaz de trabajar, lleve a cabo alguna otra actividad (tareas domésticas, hacer una reparación en casa, tomar una clase que lo haga sentir tranquilo, etcétera) que lo mantenga ocupado. Esto le permitirá mantener su mente ocupada y alejada de pensamientos dolorosos que solamente lo pueden deprimir. Llevar a cabo una actividad le permitirá sentirse menos incapacitado.

• Mientras no se sienta capaz de trabajar, lleve a cabo alguna otra actividad (tareas domésticas, hacer una reparación en casa, tomar una clase que lo haga sentir tranquilo, etcétera) que lo mantenga ocupado. Esto le permitirá mantener su mente ocupada y alejada de pensamientos dolorosos que solamente lo pueden deprimir. Llevar a cabo una actividad le permitirá sentirse menos incapacitado.

No consuma bebidas alcohólicas para olvidar sus penas, pueden ocasionar que usted se deprima más, a pesar de que inicialmente y durante un breve periodo puedan aliviarle algo. Consumir alcohol impedirá que busque ayuda adecuada para resolver su problema, además de que se verá afectada su salud.

Es necesario señalar que el apoyo de familiares o amigos en el tratamiento de la persona con problemas de depresión, es importante, ya que favorecerá una pronta recuperación e integración de ésta a sus actividades cotidianas.