Los mexicas utilizaban la palabra tlaxcali para referirse a las tortillas de maíz, tamali para los tamales y chapolin para los chapulines. Estas palabras de origen náhuatl y otras incorporadas al español, como chocolate, aguacate o jícaras, nos remiten a nuestras raíces; además, en algunas partes de Michoacán y Guanajuato se le llama taxcal al canasto de las tortillas, o tlaxcales a las gorditas de maíz.

Por fortuna estas palabras y muchas otras se conservan actualmente en comunidades de lengua náhuatl y se mantienen vivas. Es necesario valorar la herencia de las diferentes lenguas de nuestro país.

Para lograr una alimentación balanceada, se necesita que la comida sea variada, suficiente, completa e higiénica. Incluya alimentos frescos como frutas y verduras, alimentos de origen animal, granos, cereales y tubérculos, así como grasas, azúcares y harinas (estos últimos en pocas cantidades), procure aprovechar los alimentos de temporada y de la región en donde vive.