Los cuentos
María Dolores Abiega Sauto
 
A los pequeños les gusta escuchar lo que dicen las personas adultas; en muchos lugares existe todavía la costumbre de reunirse en la tarde para platicar lo que está pasando o acerca de creencias y leyendas del lugar. Aunque generalmente platican las personas adultas, los niños y las niñas escuchan con mucha atención lo que se dice, así van aprendiendo leyendas, costumbres y tradiciones. Esto sucede más en pueblos o ciudades pequeñas y se está perdiendo en las grandes ciudades.
 
 
Teniendo en cuenta ese interés de los pequeños por escuchar cuentos, cuando se está con ellos se puede ocupar parte del tiempo en contar cuentos.

Quizá usted recuerde algunas de esas historias que escuchó de pequeña. ¿Porqué no las escribe y después las comparte con los niños y las niñas de su comunidad? Seguro se divertirán.
 
 
Estas historias o narraciones se han contado desde hace muchos años y se siguen contando, algunas las escribió alguien y gracias a eso hay libros de cuentos.
 
Los cuentos son historias generalmente imaginarias, algunas con personajes reales.
En los cuentos puede suceder de todo: animales que hablan, lloran, ríen, se esconden, se divierten, se enojan, duermen.

En los cuentos, además de animales y personas, hay situaciones en que las cosas sienten calor o frío, aburrimiento o alegría. Los cuentos pueden ser largos o cortos, con dibujos y texto, es decir, con algo escrito, sólo con letras o únicamente con dibujos. También hay cuentos para adultos pero generalmente son más largos y no tienen dibujos.

A continuación, la invitamos a leer las Recomendaciones para contar, inventar y leer cuentos, para que se anime y practique para contar cuentos a los niños y las niñas.
 
Son propuestas que seguramente modificará en la práctica, ya que se aprende a contar cuentos, haciéndolo muy a menudo.