En los museos encontramos diferentes tipos de colecciones. Dependiendo de ellas, existen museos como el de Antropología e Historia, que muestran vestigios de nuestro pasado; los de arte, que exhiben pinturas o esculturas de artistas actuales o presentan figuras de cera, de personajes de la historia o populares; los museos de arte popular, muestran el quehacer de la cultura de los pueblos y los museos de música, en los que se exponen objetos, escritos o biografías relacionadas con la música.

Los museos son una buena alternativa, si queremos conocer más sobre la flora, la fauna, así como las costumbres y tradiciones de los habitantes de la región yucateca, en ellos podemos encontrar información sobre los primeros pobladores y su evolución social y cultural, así como la formación geológica de la región.

En el estado de Yucatán, estos museos los podemos encontrar en construcciones de arquitectura colonial y en algunas zonas arqueológicas, donde se conjuga la historia y la naturaleza; como ejemplo tenemos: El Parque Nacional de Dzibichaltún que se localiza a unos 15 kilómetros de la ciudad de Mérida, en dirección a la costa norte; su nombre, de origen maya significa “el lugar donde hay escritura en las piedras planas”.


En este lugar, además de poder observar los vestigios arqueológicos, es decir, los restos de pirámides que comprueban la presencia del pasado de una población maya, encontramos uno de los centros de interpretación de la naturaleza donde podemos localizar alrededor de 100 especies de aves diferentes y mamíferos, como ardillas, conejos y zorros. También es posible encontrar varias especies de reptiles, como las iguanas y algunas víboras, así como anfibios y, por supuesto, peces del cenote donde los visitantes se pueden bañar, si lo desean.

En cuanto a la vegetación, los investigadores opinan que la presencia de epifitas (plantas que crecen colgadas de los árboles), en la zona puede considerarse como un indicador de la avanzada edad de la vegetación, lo que representa su importante estado de conservación. Sobresale también la presencia de gran variedad de plantas endémicas y nativas.

Entre los servicios que ofrece este sitio, se encuentra el Museo del Pueblo Maya donde se exhiben interesantes artículos que han sido testigos de distintas facetas de la vida y cultura maya.

Así como en Dzibichaltún se conjuga el pasado maya con la naturaleza, en la gran mayoría de los sitios arqueológicos del estado yucateco se da esta relación de historia-naturaleza, tal es el caso de sitios como X Cambó en la región costera, Ek balam al oriente del estado o Yaxuná en la zona Puuc o sierrita de Ticul. Podemos decir que son grandes museos de historia al aire libre y que nos permiten estar en contacto con la naturaleza.


 

Uno de los museos que destacan en Yucatán por la belleza de su edificio y por los objetos que guarda es el Museo de Antropología e Historia de Yucatán, que se encuentra en el Palacio Cantón, sobre Paseo Montejo, en Mérida. En una de sus salas se describe la formación geológica, el ambiente y las características de Yucatán, resaltando por su importancia los cenotes.

Encontramos además muestras de caracoles y conchas de las costas yucatecas; metates y manos de molienda, igualmente, ejemplos de fauna representada en cerámica por los mayas prehispánicos.


El Museo de Historia Natural, ubicado a un costado del zoológico conocido como Parque del Centenario de la ciudad de Mérida, ofrece un interesante resumen de la evolución del universo, la Tierra y el entorno local. En el interior de sus salas se pueden admirar pinturas, gráficas, esqueletos y muestras de la flora y fauna de la región.

También existen museos de colecciones científicas, los cuales son muy importantes en la investigación y en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Un ejemplo de ellos son el Museo de Colecciones Zoológicas que posee la Licenciatura en Biología de la Universidad Autónoma de Yucatán, el cual comprende cerca de 28, 000 ejemplares, tanto animales invertebrados como vertebrados. También posee otra colección científica de grupos de plantas microscópicas* y macroscópicas*, como también colecciones de plantas vasculares*, en el herbario “Alfredo Barrera Marín” y una de hongos.

Microscópicas. Que no se pueden ver a simple vista.
Macroscópicas. Que se pueden ver a simple vista.
Plantas vasculares. Aquéllas que tienen tallo.