Unidad 3 - Tema 1 - Subtema 2 - Actividad 49
 
 
 
La noticia buena es que las emociones se educan, para eso ayuda imaginarlas como si fueran un niño interno, al que ayudamos a madurar, a manejar el miedo y el enojo, a que sepa disfrutar el placer y cuándo tiene que detenerse.
 
También te sugerimos las recomendaciones siguientes.
 
Respirar hondo, profundo y darnos tiempo para pensar.
Sentir cómo actúa la emoción en nuestro cuerpo, cómo se siente en nuestra cabeza, nuestro estómago, las manos, etcétera.
Pensar en nuestras emociones como si tuvieran cuerpo, color y olor.
Hay quienes recomiendan imaginarlas en forma simpática.
 

Conoce como lo han aprendido o practican los jóvenes de la ilustración, sólo haz clic en el botón.

 
 
 
 
 
 
 
Concéntrate en la emoción que más te cueste manejar.
 
Dale una forma que te guste.
Dialoga con ella.
 
Emoción Forma que le darías

Dile a tu emoción,
cómo te sientes con ella

 
¿Qué aprendiste de tus emociones?
 
 
Imprime y pega este ejercicio en tu cuaderno de notas personales.
 
 
Es posible aprender a reconocer nuestras emociones, lo mismo las que nos gustan que las que nos disgusten, a no pelearnos con ellas, a verlas como acompañantes de nuestra vida.