Para pensar *
   
 
 
 

Todos podemos tener sentimientos negativos. A veces estamos enojados o asustados, y en ocasiones nos sentimos alegres y felices.

 
No es raro que nos sintamos confundidos cuando sentimos cosas muy diferentes a las de los demás. A veces nos avergonzamos de nuestros sentimientos y tratamos de guardarlos en secreto.
 
Frecuentemente escondemos nuestros sentimientos y tratamos de no pensar en
ellos. Pero los sentimientos no se pueden guardar en un cajón, tienen que ir a algún lado y por eso se convierten en dolores de cabeza o de estómago, o nos hacen sentir torpes o muy cansados.
 
Podemos aprender de nuestros sentimientos si los escuchamos con atención
y hablamos a cerca de ellos con alguien. También podemos sacarlos escribiendo
y dibujando.
 
A veces, para entender nuestros sentimientos sólo tenemos que dejarlos salir
y aceptarlos tal y como son.
 
* Suplemento para niñas y niños, La Jornada, núm. 14, sábado 20 de septiembre de 2003.
 
 
¿Sabías que podemos
dialogar con nuestros
sentimientos?