Anfetaminas
   
 
 
 
Sustancias que tuvieron origen medicinal, pero en la actualidad los médicos han dejado de prescribirlas porque son altamente adictivas. Actúan en forma similar a la cocaína.
 
Su uso común es oral o nasal, y también puede ser inyectada por vía intravenosa; se distribuye rápidamente por todos los tejidos y líquidos orgánicos alcanzando altas concentraciones en el cerebro, en el líquido que rodea al cerebro y la médula espinal.
 
Producen energía, reducción de la fatiga, del sueño y el hambre. Posteriormente se presenta cansancio y una fuerte depresión, que en casos extremos puede provocar ideas de suicidio.
   
Incrementan la comunicación entre las neuronas que controlan el hambre y el sueño; el consumo crónico o desmesurado produce un estímulo excesivo que puede dañar las neuronas, lo que puede producir alteraciones mentales y conductas de aislamiento, rechazo a las relaciones sociales, a cualquier tipo de actividad, alucinaciones auditivas, sentimientos de persecución, incoherencia en el pensamiento y del lenguaje.