Enseñar a nuestros hijos e hijas a decir no y a mantenerse en esa situación, aún ante alguien insistente. Que los hijos e hijas aprendan a buscar la compañía de otros niños o niñas de su edad y que siempre cuenten con algún adulto de confianza. En caso de que nuestros hijos o hijas nos digan que sienten malestar o molestia en alguna parte de su cuerpo, acudamos inmediatamente al médico o al Centro de Salud. Si ya hubo o se está sufriendo abuso sexual debe denunciarse y buscar apoyo. |