Unidad 2 Tema 1 Actividad 18

 

 

Quien comete un delito es conocido por la ley como autor del delito o delincuente. Existen, sin embargo, distintas formas de participar en un delito.

Seguramente has escuchado alguna vez el refrán popular que dice: “Tanto peca el que mata la vaca, como el que le agarra la pata”.

Para ti, ¿qué significa esta afirmación y qué relación tiene con el tema de los delitos?

Existen distintas formas de participar en la realización de un delito, y se consideran responsables de cometerlos quienes los realizan directamente o materialmente; también quienes los planean, acuerdan o preparan; y quienes prestan ayuda para ejecutarlo u obligan a otras personas a cometerlo.

Las personas que planean un delito, son llamadas autores intelectuales. Ellas deben responder ante la ley, al igual que quienes llevan a cabo materialmente el delito.

Un ejemplo de esta forma de participación en un delito es cuando alguien planea
o proyecta un robo y lo organiza convenciendo a otros para que lo lleven a cabo.

En la siguiente tabla aparecen las personas que son consideradas responsables de un delito, para conocer el grado de participación que tienen en la ejecución del mismo, presiona la flecha correspondiente.


Deben responder ante la ley como responsables de encubrimiento quienes, después de que se comete el delito, obtienen un beneficio con el producto de éste, siempre que conozcan que dicho beneficio se obtuvo mediante una acción contraria a la ley. Es el caso de quienes comercian con cosas robadas, aun conociendo su origen.

También se considera encubrimiento cuando alguien oculta al autor o autores del delito para que no sean castigados; cuando son escondidos los objetos robados, la mercancía ilegal o el cuerpo de una persona asesinada, con el propósito de que las autoridades no puedan castigar a quienes participaron en la realización del delito.


Son igualmente responsables de encubrimiento las personas que tienen la obligación, y no lo hacen, de colaborar con las autoridades que investigan los delitos y persiguen a los delincuentes. De la misma forma son encubridores quienes no impidan los delitos, pudiendo hacerlo sin ponerse en riesgo.

De lo anterior se concluye que todas las personas que participan en un delito, o lo encubren, deben ser castigadas de acuerdo con su grado de participación.

Investiga y describe un caso, aunque no sea reciente, en el que se haya impuesto una sanción penal a una persona por participar en un homicidio como autor intelectual del delito.

¿Qué piensas que podemos hacer para evitar convertirnos en encubridores de un delito del que tenemos conocimiento?

Escribe un caso inventado en el que se cometa un delito. En la narración incluye un autor intelectual del delito, autores materiales del mismo y encubridores; ponle nombre a tus personajes.

De acuerdo con tu historia, anota en la siguiente tabla lo que hizo cada participante para cometer el delito.

Participante
Nombre del personaje en la historia
Acciones que realizó para cometer el delito
Autor intelectual
Autores materiales
Encubridores



La ley prevé sanciones para todos los participantes del delito, independientemente de la forma en que hayan tomado parte (planeándolo, ejecutándolo, prestando ayuda para su realización o encubriéndolo); las sanciones previstas por la ley para cada uno de ellos varían según su grado de participación y responsabilidad.

Lee el siguiente texto y después contesta la pregunta.

Todos tenemos la obligación de no encubrir los delitos de los que tenemos conocimiento, y de enterar a las autoridades de los hechos delictivos.

Sin embargo, el Código Penal Federal establece, en su artículo 400, que no debe castigarse por encubrimiento a las personas que tengan una relación cercana con el autor del delito. En el siguiente cuadro se mencionan a estas personas.

Parentesco de personas que no pueden ser responsables
del delito de encubrimiento
Padre, madre, abuelas, abuelos del delincuente.
(Se les llama ascendientes consanguíneos).
Hijos, hijas, nietas, nietos del delincuente.
(Se les llama descendientes consanguíneos).
Suegra o suegro del delincuente
(Se les llama ascendientes por afinidad).
Yerno o nuera del delincuente.
(Se les llama descendientes por afinidad).
Cónyuge: esposo o esposa del delincuente.
Concubina: mujer soltera con la que un hombre soltero (el delincuente) ha vivido por más de dos años o con la que tiene hijos.
  • Parientes consanguíneos colaterales hasta el cuarto grado:
  • Hermanos y hermanas del delincuente.
  • Sobrinos y sobrinas del delincuente.
  • Tíos y tías del delincuente.
  • Primos y primas del delincuente.
Parientes colaterales por afinidad hasta el segundo grado:
Cuñado o cuñada del delincuente.
Los que estén ligados con el delincuente por amor, respeto, gratitud, o estrecha amistad:
Amigo, amiga, compadre o comadre del delincuente.

Los parientes consanguíneos son aquellos que comparten sangre por ser parte de un tronco común, como es la abuela, el abuelo, la madre o el padre. Los parientes no consanguíneos son aquellos que no presentan un vínculo de sangre, como son los parientes políticos, o los parientes por un vinculo legal como el matrimonio; a esta relación de parentesco se le denomina afinidad. Se le llama parientes colaterales a quienes proceden de un tronco común: hermanas, hermanos, primos, tías, tíos.


Contesta la pregunta.

¿Cuál consideras la razón principal por la cual, la propia ley no castiga a quien encubre un delito cometido por un familiar o por una persona muy cercana?

Comenta con otras personas tus ideas sobre el tema, pero antes presiona sobre el libro y verás una última reflexión. No olvides guardar tu trabajo.


Las leyes reconocen que una persona enfrentaría una situación muy difícil si fuera obligada a denunciar a sus seres queridos o a personas con las que tiene una relación muy estrecha. De ahí que dicha conducta no sea castigada. Sin embargo, el hecho de que no se castigue el encubrimiento en estos casos, no significa que la ley permita la impunidad, ni tampoco que admita la realización de actos dirigidos a obstaculizar la acción de las autoridades encargadas de procuración de justicia, como corromper (G) a las autoridades, amenazar a los testigos y alterar documentos oficiales con la intención de borrar o desaparecer pruebas o evidencias del delito.