El representante de la CONDUSEF mencionó las siguientes formas de ahorro:

   
En forma individual.
   
En tandas.
   
Compra de metales preciosos.
   
Compra de monedas extranjeras que no estén expuestas a fuertes devaluaciones.
   
Cajas populares de ahorro.
   
Bancos.
   
¿Cuáles de estas formas de ahorro has utilizado?




—Algunas de estas formas de ahorro, siguió el contador Pérez, no son muy seguras y tienen menos ventajas, por ejemplo:
Si guardamos el dinero en un colchón, aunque resulte muy seguro, con el tiempo se devaluará.
En las tandas, se corre el riesgo de que alguno de los participantes no pague y entonces se puede perder más.
En los metales preciosos se pueden lograr rendimientos a plazos largos pero, igual que las monedas extranjeras, su dinámica está sujeta al mercado internacional.
En las cajas populares es importante contar con información de su trayectoria, saber su regulación oficial, sus programas y la tasa de interés que ofrecen a los ahorradores.
Los bancos, por su parte, ofrecen diversas formas de ahorro según la cantidad de recursos y el tiempo en el que se desea ahorrar.


—La mejor cuenta de ahorro es la que ofrece la mayor tasa de interés y cobra las menores comisiones. Es importante comparar la tasa de interés anual, con la inflación esperada en el año. La cuenta de ahorro sirve para mantener una pequeña parte de nuestro patrimonio que podríamos requerir en cualquier momento.

Yo no entendí muy bien el asunto de la inflación, así es que le pedí al contador Pérez que analizáramos un ejemplo.

EJEMPLO

Para aclarar lo anterior, expuse al grupo y al contador el siguiente ejemplo:

Si yo quiero comprar un refrigerador que cuesta 6 mil pesos y ahorro 500 pesos cada mes, voy a juntar el dinero en 12 meses, pero lo más seguro, es que en ese tiempo suban de precio. ¿Cuánto tendré qué pagar?, ¿me alcanzarán mis ahorros?

—Creo que podemos estimar el precio futuro del refrigerador, aplicándole el porcentaje de inflación que se espera en un el año —señaló Pepe. Por ejemplo, si la inflación esperada es de 5% y si el refrigerador hoy cuesta 6 mil pesos, en un año el costo se elevará a 6 mil 300 pesos.

—¡Claro!, se apresuró a decir el contador Pérez, —pero no se debe olvidar que el porcentaje de inflación es un promedio que se obtiene del costo de muchísimos productos y que, tanto el refrigerador como otros productos podrían mantener su precio, subirlo o incluso bajarlo. Lo importante es tener un sistema de ahorro que ayude a cuidar el dinero y mantener el poder de compra. Por ejemplo, antes de concluir, permítanme informarles sobre la cuenta de ahorro:

¿Alguna vez has abierto una cuenta de ahorro en un banco?

             
 
  No
             

Si tu respuesta fue afirmativa, describe tu experiencia sobre la cuenta de ahorro y la institución que utilizaste:

La cuenta de ahorro

Con respecto a ésta, el contador Pérez nos explicó que:

De las inversiones bancarias, la cuenta de ahorro presenta el menor riesgo y, por lo tanto, ofrece el menor rendimiento o tasa de interés. Es muy segura porque el banco está obligado a restituir el monto depositado, está respaldado por el Instituo de Protección al Ahorro Bancario, y es vigilado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. Además, el saldo está disponible en cualquier momento.

—También, debemos tener en cuenta que en la actualidad muchos bancos, no pagan intereses por cuentas de ahorro y exigen una cantidad mínima para abrirlas, agregó el contador Pérez.

—Tal vez en nuestro caso, como pequeños ahorradores —dijo Lupita, nos conviene entrar primero a un programa fuera de los bancos, con cantidades pequeñas y luego ya entrar a los bancos.

—Juanita, tal vez tú te acuerdes de lo que nos dijeron sobre el ahorro en Caja Libertad, continuó Lupita.

Saqué mi libreta y les expliqué que en esa institución existen los siguientes programas de ahorro:

  Ahorro normal, con tasa de 5% capitalizable trimestralmente.

Ahorro a la vista, con una tasa de 6.30% anualizada.

Ahorro al plazo, en el que varía la tasa de interés establecida por el banco de acuerdo con la cantidad ahorrada. Entre mayor sea ésta, mayor será el interés. En el rango de 500 a 2000 pesos, se otorga el 7.10% anual en plazos de 28 a 55 días.
 


—Bueno, ya saben que las tasas se van modificando, señaló el contador Pérez, —lo importante
es que si alguien decide entrar por esta forma de ahorro, pregunte por las tasas vigentes y haga sus cálculos conforme a la inflación esperada.

En este punto todos empezamos a hablar para expresar nuestra opinión: Pepe señaló que lo mejor era investigar qué institución otorga las mejores condiciones; José Luis pensaba que lo mejor era gastarse la lana antes de que se devaluará; Pedro opinó que el mejor rendimiento era el que podía darnos nuestro propio negocio…

Y tú, ¿cuál piensas que es la mejor forma de ahorrar para tu negocio?




¿Por qué?


Veamos enseguida la conclusión de la plática con el contador Pérez.


El contador Pérez concluyó la plática de la siguiente manera:

—Para terminar, quiero decirles que lo más importante es que tengan claridad sobre sus propósitos para ahorrar porque ello les permitirá decidir cuánto ahorrar, dónde hacerlo y durante cuánto tiempo. No olviden que, a pesar de que sus negocios son pequeños y viven al día, el germen de su crecimiento puede ser el ahorro. Vale la pena un poco de esfuerzo y sacrificio para tener un negocio que les permita vivir decorosamente. Traten de ahorrar, aunque sea una cantidad pequeña, pero constante y ustedes mismos podrán comprobar en la práctica cómo el ahorro llama a dinero. ¡Muchas gracias y les deseo toda la suerte del mundo!


Por nuestra parte, recibimos la plática del contador Pérez con agrado y lo despedimos con un aplauso.


Al concluir, todos nos quedamos pensando en cuál era la mejor opción:

Buscar una combinación de ahorro y crédito…, comentaban Pedro y Pepe; …guardar diariamente una pequeña cantidad para una emergencia o para la vejez…, platicaban Rosa, Matilde y Lupita.