La casa en que vive el menor es el lugar donde permanece la mayor parte del tiempo, y puede representar un peligro si no se toman las medidas necesarias. Busque aquellos lugares que considere peligrosos y transfórmelos en espacios seguros, es una labor inmediata y urgente para garantizar que los menores estén a salvo.
Dé un clic en aquellas imágenes que considere representan un peligro para los menores.
Algunas recomendaciones para procurar espacios seguros:
Revise cuidadosamente que no existan objetos pequeños que se pueda llevar a la boca.
Ponga en lugares seguros líquidos de limpieza y detergentes; evite poner aguarrás, alcohol u otras sustancias tóxicas en envases de refresco.
Coloque las medicinas en lugares altos o con llave para que no las tome; si se da el caso, acuda inmediatamente al centro de salud.
No coloque la cama de los menores cerca de las ventanas.
Sacuda diariamente la cama donde duermen para evitar insectos, parásitos, ratas o ratones. En caso de mordedura o picadura acuda al centro de salud.
Mantenga tapado el escusado, tinas o cisternas para evitar que se caiga y se ahogue.
Evite que los menores manejen aparatos electrodomésticos.
Coloque ollas y sartenes en las hornillas cercanas a la pared con el mango hacia adentro.
Vigile que los pequeños no jueguen con bolsas de plástico, si se las meten en la cabeza, hacen “vacío” y se pueden asfixiar.
No pierda de vista al menor en lugares públicos: mercados, cines, parques, carreteras, ríos o lagunas.
Observe las siguientes imágenes y jale con el puntero del ratón aquellas que correspondan a la clasificación de los cuadros de abajo.
Tome en cuenta que la mayoría de los accidentes que sufren los menores de cinco años son por descuido y falta de precaución de las personas adultas.