Unidad 1 Tema 2 Actividad 5

 


Pasar de las palabras sueltas con significado, por ejemplo, pan, quiere decir: tengo hambre, dame de comer, a expresar oraciones complejas como "Tengo hambre, quiero comer el arroz con chícharos que sabe muy rico"; depende de cuánto les hablemos y motivemos para hacerlo, de ahí que es importante que se aprovechen para conversar momentos como la comida, cuando está jugando con ellos; procure escuchar sin interrumpir ni burlarse cuando "hablan solos".


Observe las imágenes y conteste.


Describa lo que observa en las imágenes.

Dé un CLIC en las palabras que considere presentan dificultad para pronunciar los menores de 3 y 4 años.


Ratón Carro Perro Laura Carne Carlos Clavo
                           
Reata Tortilla Tlacuache Yunta Blusa Cabra Mugre

Escriba cómo puede apoyar para que un niño de cuatro años aprenda a decir su nombre completo y la dirección donde vive.

Algunas recomendaciones para ayudarlos a hablar más y mejor:
   
Señale los objetos que estén cerca y mencione su nombre y alguna cualidad.
 
Pronuncie las palabras despacio, claras, con entonación "normal", evite palabras "altisonantes o groseras", que no se usen en su comunidad.
 
Háblele todo lo que pueda de forma alegre, a manera de juego, por ejemplo, juegue a decir el nombre de: familiares, de frutas o de animalitos, si puede invítelos a que dibujen lo que van diciendo.
 
Anteponga a las palabras artículos o adjetivos, por ejemplo, la casa, el perro, esa vaca, esos niños; señálelos con el dedo o con la mano.
   
Cuando note que los pequeños tienen dificultad para pronunciar alguna palabra repítasela aún más despacio y mirándole a la cara, abriendo bien la boca para que imite la pronunciación, úselas lo más frecuente que pueda.
   
Cante y baile con los pequeños, les ayuda a memorizar, a pronunciar mejor y a recordar con mayor facilidad.