Cada día aprende algo nuevo, se puede comunicar
más con algunas palabras, entiende muchas de las
cosas que se le dicen, reconoce a quienes lo rodean y
con quien convive, se desplaza con mayor facilidad
en la casa, gatea e incluso empieza a dar pasos, aún cae porque no domina el caminar todavía.
Cada
niña o niño tiene su propio momento para caminar y hablar,
no lo presione, deje que él solo decida cuándo
quiere hacerlo; esto puede suceder entre los 11 y 18 meses, por lo
que es importante darle seguridad y ánimo todo el tiempo.
Reflexione sobre los lugares en que se encuentra un bebé.
Escriba ¿cuáles son?
Considera que pueden ser riesgosos para ellos, ¿por qué?
¿Qué tiene que hacer para que no sean
un riesgo para el bebé?
Ahora proteja los sitios que usted considere peligrosos para el bebé. Es muy importante que siempre esté pendiente, para evitar accidentes. Recuerde que él
todavía no comprende cuáles son los espacios
u objetos de cuidado, la experiencia le enseñará, pero
usted tiene la responsabilidad de protegerlo.
Como el pequeño tiene curiosidad por conocer el mundo
que le rodea, investiga y va de un lado para otro, estimúlelo, cuídelo y protégalo ya que esto le ayudará en su desarrollo social y afectivo.