Unidad 1 La convivencia social y familiar

 

Subtema 3. Convivencia familiar y conflicto
El conflicto en nuestra familia

Elija la opción que considere correcta.

Algunos conflictos que surgen en las familias, son:

Los pleitos entre hermanos, por cualquier cosa y sin lograr ponerse de acuerdo.
Con la pareja, por la falta de dinero para poder adquirir lo que se necesita.
Porque los hijos/as mayores regresan a la casa alcoholizados los fines de semana.

El conflicto en las familias

En todas las familias surgen diferencias, cuando dos o más personas no comparten las mismas ideas, intereses, necesidades o valores, como por ejemplo: la manera de colaborar en el hogar; cuando alguien impone sus ideas a otro, o bien por la manera de distribuir los recursos económicos para vivir.

Esto puede dificultar el entendimiento y crear enojo, molestia o resentimiento y por lo tanto originar algún conflicto.

Otros problemas surgen por falta de afecto, de respeto y de reconocimiento que necesitamos todos, por ejemplo: cuando no respetamos los derechos que tienen los niños(as) de expresarse y manifestar su opinión; cuando utilizamos objetos que no nos pertenecen; cuando no cumplimos con nuestras responsabilidades en el hogar; o cuando mentimos o engañamos a alguna persona de nuestra familia.

Elija la opción que considere correcta.

Un conflicto familiar es:

La situación en la que dos o más personas de la familia se niegan a hablar entre ellas.
Una situación familiar que nunca debe suceder.
Una situación donde dos o más miembros de una familia no se ponen de acuerdo.
 

Resolución de conflictos familiares

El conflicto familiar, si no se resuelve, puede llegar a la ruptura de los lazos familiares como es el caso de las separación de las parejas, o a generar situaciones de violencia; como por ejemplo, cuando el hombre agrede a su pareja e hijos o las madres a sus hijos.

Hay familias que viven conflictos que duran mucho tiempo, otras en que sus conflictos son diferentes pero constantes y que al no solucionarse lesionan el afecto, la confianza y la relación entre sus integrantes.

Otras familias resuelven sus conflictos a través de la comunicación y el diálogo, sin dañar el aprecio y cariño que se tienen. Aprenden a resolver los conflictos de manera no violenta y participan conjuntamente en la solución de situaciones difíciles. Evitan la violencia en las relaciones diarias y crean un ambiente de confianza y seguridad.

Elija la opción que corresponda a su opinión.

Tres conflictos por los que se enfrentan las familias, son:

La distribución de las herencias.
Cuando viven varios hijos/as con sus parejas en la casa de sus padres.
El trato preferente que padre y/o madre dan sólo a uno de los hijos/as.

Elija la opción que considere correcta.

Tres soluciones posibles a los conflictos anteriores son:

Que el padre y/o la madre distribuyan de manera equitativa entre sus hijos e hijas, los bienes que heredan.
Que todos los miembros de la familia utilicen la comunicación, diálogo, acuerdos, escucha, respeto, étera, para solucionar los conflictos que surjan.
Que los hijos/as afectados comuniquen a sus padres cómo se sienten; que todos se escuchen con respeto; que dialoguen y que utilicen la propuesta de este curso.

Reconocer el conflicto es aceptar que existe

Es importante reconocer cuáles son los conflictos que hay en nuestra familia y tratar de comprender por qué y cómo surgen. Reconocerlos y aceptarlos nos ayudará a proponer soluciones y, en ocasiones, a ceder a lo que los demás desean, siempre y cuando no se pase por encima de nuestras necesidades y derechos.

Todos y todas podemos ayudar a que el conflicto familiar se solucione y no cause daño, si practicamos:

• Comunicar a los demás nuestras ideas.
• Escuchar atentamente lo que piensan y opinan los otros, y
• Acordar cómo resolver los conflictos.

De esta manera fortalecemos el respeto mutuo y el afecto que son la base de la convivencia familiar.

Dé un clic en la opción que elija.

De las siguientes situaciones, elija las que no crean conflictos.

Cuando alguien en la familia toma objetos de nuestro uso personal, preguntamos quién lo hizo y platicamos.
Cuando el marido llega con el gasto incompleto y en estado de ebriedad.
Cuando los niños/as de la casa hacen travesuras, los/las regañan y les pegan.
Cuando los integrantes de la familia no colaboran en los quehaceres del hogar.
Cuando se enojan algunas parejas y después platican para ponerse de acuerdo en sus diferencias.

Seleccione la opción que considere correcta:

¿Cree usted que el conflicto familiar cuando no se resuelve, lesiona las relaciones familiares?

Sí las lesiona, y se puede llegar a la separación de la pareja, cuando no se resuelve.
Si el conflicto familiar no se resuelve, se convierte en relación de violencia. Por ejemplo, el padre que agrede a su pareja, hijos e hijas; y la madre que agrede a sus hijos e hijas.
En todas las familias hay conflictos, cuando no se resuelven se olvidan y la vida continúa.

Dé un clic en la opción que considere correcta.

¿Por qué es importante que los conflictos familiares se resuelvan?

Porque es importante evitar la ruptura de los lazos familiares.
Porque si se resulven unos conflictos, siempre van a parecer otros.
Para evitar situaciones de violencia que lesionan el afecto, la confianza y la relación entre sus integrantes.
Para favorecer un ambiente de confianza y seguridad en la familia.

Los conflictos familiares pueden solucionarse

 

Algunas personas no buscan la solución de los conflictos familiares, por temor a que se generen problemas mayores, o por no saber qué hacer.
Cuando los conflictos no se resuelven y se viven por mucho tiempo, se lesionan el aprecio y el respeto que se requieren para la convivencia familiar.

Todos enfrentamos conflictos familiares, algunos son sencillos y se resuelven a través de la comunicación y escuchando a los demás; otros son más difíciles de resolver y nos parece que las acciones para solucionarlos son difíciles de llevar a cabo, sin embargo, también tienen solución.

Elija las opciones que considere acertadas.

Algunos conflictos que le parecen difícil de resolver, son:

El cuidado de los abuelos y las abuelas.
El asunto de las vacaciones.
El asunto del tiempo para compartir juntos.
La distribución de tareas domésticas entre todos los miembros de la familia.
La atención a los miembros de la familia con discapacidad física o mental.
Todos los conflictos tienen solución

Ante los conflictos difíciles no es fácil encontrar soluciones, pero se puede lograr si tratamos de mantener el respeto y la comunicación entre los integrantes de la familia.

Por ello, es importante tomar en cuenta que todos(as) tenemos derechos; saber que nadie vale más que otro; procurar no agredir física o emocionalmente y, en algunos casos, solicitar orientación y ayuda para definir o distinguir qué tipo de problema o conflicto tenemos y qué podemos hacer.