![]() |
Unidad 3 • Tema 3 • Actividad 18 ![]() Actividad 18. Señales de auxilio
Iván pasa demasiado tiempo solo; se siente fracasado y la vida ya no le entusiasma.
Acciones de protección
Acciones de protección
Acciones de protección
Las siguientes son algunas acciones que podemos poner en práctica si nos damos cuenta de que alguien está en riesgo de quitarse la vida:
Los trastornos emocionales no son una condición que se pueda alejar a voluntad; por lo tanto, no basta con “animarse” o “echarle ganas” para sentirse mejor.
Lo que sí podemos hacer es aprender a prevenir, detectar y a solicitar ayuda oportuna y adecuada y seguir el tratamiento indicado.
Completa tu Directorio con los datos de los centros de ayuda más cercanos a tu domicilio.
Describe algunos de los achaques de don Guillermo.
¿Conoces alguna situación parecida? Descríbela:
¿Cuál es la mejor cura?
Conservar o recuperar la salud es nuestra responsabilidad. En la medida en que identifiquemos y aceptemos los sentimientos y comportamientos que nos hacen daño, podremos empezar a cambiarlos mediante el cuidado amoroso de nuestro cuerpo y de nuestros sentimientos; de esta forma, también podremos mejorar la relación con el mundo que nos rodea.
De joven, mi oración consistía en decir a Dios: “Señor, dame fuerzas para cambiar el mundo”. A medida que fui haciéndome adulto y caí en la cuenta de que me había pasado media vida sin haber logrado cambiar a una sola alma, transformé mi oración y comencé a decir “Señor, dame la gracia de transformar a cuantos entran en contacto conmigo. Aunque sólo sea a mi familia y a mis amigos. Con esos me doy por satisfecho”. Ahora, que soy un viejo y tengo los días contados, he empezado a comprender lo tonto que he sido. Mi única oración es la siguiente: “Señor, dame la gracia de cambiarme a mí mismo”. Si yo hubiera orado de este modo desde el principio, no habría malgastado mi vida. Anthony de Mello
¡Felicidades, has concluido el curso! La vida consiste en abrirse hacia lo posible, en prepararse viendo hacia el horizonte del futuro. La esperanza es una visión de aquello que puede ser, de lo que deseamos, de lo que podemos realizar; de aquello que debemos perseguir con voluntad, asumiendo los riesgos que conlleva.
La capacidad de esperar, de luchar por una meta sin desalentarnos, es fundamental para tener éxito y lograr nuestros objetivos. La esperanza proviene de nuestro interior y establece una relación de confianza con la vida y el mundo que nos rodea. Cuando nos llenamos de esperanza asumimos el compromiso de luchar con valentía por lo que queremos, salvando con inteligencia y perseverancia los obstáculos que se nos presentan. La esperanza nos hace soñar con los ojos abiertos, nos anima a descubrir maneras diferentes de resolver problemas, nos ayuda a construir proyectos y a lograr un mayor bienestar personal, familiar y social. La fuerza de ánimo, el aprecio por la vida, el amor, el compromiso, la capacidad de adaptación y de superar obstáculos son los recursos de la esperanza. La esperanza nos permite cultivar la felicidad mediante un comportamiento sincero con nosotros mismos que nos lleva a abrirnos al mundo, a valorar lo que tenemos y a compartir con otras personas por medio del servicio desinteresado. ¡Gracias por seguir estudiando! Te invitamos a compartir lo que has aprendido con las personas que te rodean.
|