1952

La inauguración de la Ciudad Universitaria

Hace más de mil años el Xitle, un pequeño volcán ubicado en las faldas del Ajusco, arrojó su lengua de fuego para enterrar a Cuicuilco, una de las culturas más importantes del periodo preclásico. Y sobre esas ruinas escondidas, los hombres de este siglo levantaron una urbe dedicada a la cultura. Fue Miguel Alemán quien el 7 de noviembre de 1952 “dedicó" –como se dijo en aquel entonces– esta obra al pueblo de México. 23 días después dejaba la Presidencia.

El día de su inauguración, Ciudad Universitaria aún no estaba totalmente terminada... habrían de pasar dos años más para que la comunidad académica y estudiantil comenzara su traslado a este nuevo recinto educativo, ubicado en la zona del Pedregal de San Ángel, por el rumbo de Tlalpan.

Fundada en 1910, la Universidad Nacional se encontraba dispersa y concentrada en el centro de la ciudad: su barrio abarcaba del Zócalo al Carmen y de San Juan de Letrán a Loreto, un área no muy conveniente para los jóvenes que, muy a la mano, encontraban billares, cantinas y cabaretuchos.

A lo anterior había otro factor que agregar: la concentración de estudiantes en las cercanías de Palacio Nacional hacía que cualquier conmoción se extendiera como reguero de pólvora, en una zona, por otra parte, muy densa en comercios y oficinas públicas y privadas.

Ciudad Universitaria y su aislamiento acabarían con el problema y, con el paso, harían realidad uno de le tantos sueños acariciados por Justo Sierra, contar con una universidad unida en lo académico y en lo espacial.


Miguel Alemán Valdés inaugura Ciudad Universitaria, el 7 de noviembre de 1952.


2 de abril. Se crea la Confederación Regional Obrera y Campesina (CROC), auspiciada por Adolfo López Mateos, Secretario del Trabajo y Previsión Social.

10 de mayo. Se inauguran formalmente las operaciones de XHGCTV-Canal 5, propiedad de Guillermo González Camarena, con la transmisión a control remoto desde el Teatro Alameda de un festival organizado por el periódico Excélsior, por el Día de las Madres.

16 de noviembre. En la Plaza México, Carlos Arruza en matemática faena le cortó las dos orejas y el rabo a Bardovián, espléndido ejemplar de la ganadería de Zacatepec, que es sinónimo del toro con genio, con raza, con codicia y con bravura. Arniza duró poco como matador, aburrido y quizá entristecido por la muerte de su amigo Manolete, se retiró, y no logrando matar el gusanillo del toro, regresó como rejoneador. En esas ocasiones la gente quería que bajara del caballo y toreara a pie para tal vez, verle una serie de estatuarios inverosímiles. Carlos Arruza murió en un accidente de carretera el 20 de mayo de 1966 a los 46 años.

El Ciclón en su faena consagratoria a Bardovian, de Zacatepec.

30 de diciembre. Se promulga la nueva Ley de Responsabilidades para Funcionarios y Empleados Públicos.

1º de diciembre. Protesta como presidente el licenciado Adolfo Ruiz Cortines.