El huerto familiar

Crear un huerto familiar en el hogar es muy fácil. Puede hacerse en un pequeño espacio en el patio, en macetas, botes viejos o bolsas. Además, con esto se obtienen frutas y verduras frescas, que al combinarse adecuadamente entre sí o con otros
alimentos, proporcionan una dieta sana para cualquier persona.

¿Qué necesitamos?

• Abono (puede obtenerse de la composta o del sanitario ecológico seco).     • Herramientas básicas: pala, rastrillo, pico, azadón, araña y manguera.     • Semillas.

¿Cómo construirlo?

1. Elegir un terreno que no esté muy sombreado por árboles o bardas y que no se inunde o encharque fácilmente.

2. Aflojar y voltear la tierra a unos 30 cm de profundidad. Asegurarse de que el terreno quede libre de piedras, hierbas y basuras.

3. Agregar al suelo abono orgánico en perfecto estado de descomposición y mezclarlo con tierra. La proporción es de 3 kg de abono por cada metro cuadrado de terreno.

4. Trazar surcos si el lugar es de suficiente agua y lluvia. En caso contrario, es más recomendable un suelo plano.

5. Seleccionar semilla para sembrar según la época del año. Puede trazarse una línea de semillas y cubrirla con 1 ó 2 cm de tierra. También conviene dejar una distancia entre planta y planta.

6. Debe regarse el cultivo cada tres días.

Rotación de cultivos

Para evitar el agotamiento del suelo hay que cambiar de cultivos cada temporada.

Donde se cosecharon hortalizas de hoja, sembrar hortalizas de raíz.
Donde se cosecharon hortalizas de raíz, sembrar frijoles o ejotes.
Donde se cosecharon frijoles o ejotes, sembrar hortalizas de fruto.
Donde se cosecharon hortalizas de fruto, sembrar hortalizas de hoja.