SECAR EL MAÍZ

                 Después de seleccionar la semilla para el
                          próximo ciclo agrícola, los ejidatarios
                              prepararon las plantas para secar el
                                  maíz.

                                     Esta actividad consiste en doblar
                                   cada planta de maíz a la altura de
                               los elotes, así se protegen del ataque
                           de algunas aves y de la lluvia, con lo que
                     evitan que se formen hongos o se pudran las
                 mazorcas.

Cuando las mazorcas estuvieron secas, las separaron de las plantas y las llevaron al ejido para desgranarlas, tarea que hicieron en forma manual.


Como tú sabes, de la mazorca se obtienen tres productos, el maíz, del que ya dijimos que se pueden hacer diversos alimentos; las hojas que sirven para hacer tamales o artesanías; y los olotes que se pueden utilizar como combustible.

Los ejidatarios, al tiempo en que desgranaron las mazorcas, vaciaron el maíz en costales de 50 kg cada uno.

En total llenaron 40 bultos, lo que significa que se obtuvo un total de 2 toneladas por una hectárea.



CONSERVACIÓN DEL MAÍZ
Para conservar el maíz, los ejidatarios almacenaron los bultos dentro de un cobertizo, y acomodaron los costales sobre unas tarimas de madera, para evitar que el maíz se pudra por la humedad.

Acomodar los costales de esta forma permite que el maíz se ventile o airee para conservarlo por más tiempo.