Unidad 1
¿Cómo son nuestros hijos e hijas?
Bloque 2
De los cuatro a los diez años
 

El propósito de este bloque es reconocer algunas características del crecimiento y desarrollo de los niños y niñas de cuatro a diez años de edad.

     
 
 
     

A los cuatro años de edad

Los niños a los cuatro años de edad son más seguros en sus movimientos.

Caminan con más confianza y cada vez llegan más lejos, a veces lo hacen de puntitas, de talones o brincando; les encanta dar vueltas sobre sí mismos y demuestran su equilibrio. Aprenden fácilmente a trepar, saltar o conducir pequeños coches o triciclos.

Desarrollan mayor confianza y conocimiento de sí mismos y de los demás, lo que les permite ser aceptados por otros niños y niñas.

 
 
     

Los niños y niñas de de esta edad necesitan ejercitarse, sentir y probar lo que pueden hacer con el desarrollo y crecimiento que han alcanzado, por lo que es muy importante permitir que jueguen al aire libre y que se “arriesguen” a realizar movimientos más complicados, como trepar, saltar, etcétera.

Es conveniente que las niñas y los niños no realicen trabajos de personas adultas que afecten el crecimiento de su cuerpo y de su mente; se encuentran en la etapa de crecer, aprender, jugar y aún no están preparados para el trabajo, sin embargo, pueden realizar tareas en el hogar como recoger sus cosas para que aprendan a ser responsables.

Los golpes castigos y amenazas dañan la salud y el desarrollo de los niños y niñas, los gritos impiden la comunicación afectiva, hablando es como logramos comunicarnos con ellos.

 
 
• El lenguaje y comunicación en los niños y niñas de cuatro años

A los cuatro años niños y niñas conversan, platican, utilizan muchas palabras y se esfuerzan por hablar mejor. En algunos casos tienen dificultad en la pronunciación de la R, RR, L o T. Necesitan dar y escuchar explicaciones, preguntar, responder. Pueden repetir cantos, versos sencillos y rimas.

Propiciar que los niños y niñas logren hablar de manera comprensible y clara, usando las palabras adecuadas, es muy importante para estimular el lenguaje, así como el desarrollo de su inteligencia.

Deben aprender a llamar a las cosas por su nombre, sin abreviar o cambiar las palabras para evitar que sigan diciendo "quielo", en vez de "quiero"; "calo", en vez de "carro"; no habrá necesidad de decirles ¡habla bien!, ¡así no se dice!, ¡repite! Simplemente, al escuchar decir de manera correcta el nombre de las cosas, lo aprenderán, a menos que tengan algún problema que deba ser revisado por el médico.

Recuerda que para apoyar el desarrollo del lenguaje es necesario que los adultos pronunciemos de manera correcta las palabras.

 
 
 
El lenguaje no es la única forma de comunicación: los gestos, ademanes, dibujos, actitudes, como el ignorar a alguien o las burlas, también son formas de comunicación.
 
 
 
 

Por lo general, alrededor de los cuatro años de edad los niños y las niñas siempre hacen preguntas de: ¿qué?, ¿por qué?, ¿qué es?, ¿qué quiere decir? Son curiosos porque están conociendo la vida, los objetos, las personas, los animales y las situaciones de la vida.

Para las personas adultas mucho de lo que nos rodea es simple, pero para los niños y niñas es un "mundo por descubrir" que necesitan conocer y entender. Por ello, es recomendable explicarles por qué suceden las cosas y cómo son. También necesitan compartir con nosotros sus explicaciones.

 
 
     

Tiempo de ir a la escuela

En nuestro país se establece que la educación básica es obligatoria e inicia con la educación preescolar, a la cual los niños y niñas asisten entre los cuatro y cinco años y es muy importante para su desarrollo social, mental y físico.

El aprendizaje se inicia con el desarrollo de diversas destrezas y habilidades como recortar, pegar, contar, cantar, bailar; se favorece la convivencia con otros niños y niñas; se enriquece su lenguaje y aprenden nuevos conocimientos que les servirán para llegar mejor preparados a la primaria.

En la escuela los niños y niñas complementan y fortalecen lo que han aprendido en el hogar.

 
 
     
   
   
 
Los niños y niñas a los cinco años de edad
 
A partir de los cinco años es posible que empiecen a interesarse por escribir, por asistir a paseos que antes no les llamaban la atención, por participar en ciertas tareas en el hogar, por conocer o ver programas de televisión.
 
 

Otras características del desarrollo

La inteligencia
Es la capacidad de pensar, recordar, entender, repetir, aprender y aplicar conocimientos. Hay niños de cinco años que están más preparados para la lectura, la escritura y las cuentas, que otros; hay que ayudarlos en casa con las tareas escolares.

Desarrollo físico e independencia
Tienen mayor control de su cuerpo y han adquirido más habilidades: pueden cepillarse los dientes y peinarse. Toman lápices y colores con más seguridad y decisión, colorean, cortan papel, dibujan a sus padres y lo que ven, entre otras cosas.

     
En algunas ocasiones los niños y niñas de cinco años pueden tener algunos temores, como el miedo a la oscuridad o a quedarse solos; también algunas imágenes o animales los asustan o tienen pesadillas y despiertan llorando; algo que vieron o escucharon puede inquietarles y causarles temor. No los regañemos, platiquemos con ellos y démosles confianza.
 
 
 
 
 
 
Es común que a los temores que sienten los niños y niñas les demos poca importancia y les digamos que "no pasa nada". Sin embargo, aunque nosotros no lo veamos, ellos están sintiendo "algo" que no sabemos qué es, pero para él o ella sí existe.

Es necesario dar la debida importancia a lo que expresan, tratar de comprender lo que nos dicen, mostrar respeto e interés y ofrecerles apoyo. Al sentirse acompañado, comprendido y apoyado, el niño tendrá mayores posibilidades de superar por sí mismo sus temores.

También es recomendable evitar asustarlos con el "coco", el "diablo", los "fantasmas" o provocar situaciones que los atemoricen.

 
• Fortalecer la seguridad y confianza en sí mismos, para su independencia

Las niñas y los niños de cinco años pueden realizar algunas actividades como responsabilizarse de ciertas tareas sencillas; lavarse las manos antes y después de comer, lavarse los dientes y bañarse con ayuda, aunque prefieren hacerlo solos; también les gusta asistir a la escuela.

Observan con más detenimiento lo que pasa en su casa, preguntan lo que les inquieta, quieren saber el significado de las palabras, estas acciones son parte importante de su actividad diaria, favorecen el desarrollo de su inteligencia y sus aprendizajes. Por ello, es recomendable escucharlos, platicar con ellos y ellas, preguntarles, ¿qué piensan?, ¿qué sienten? y tratar de explicarles sus dudas.

• La importancia de prevenir accidentes
Los accidentes son una de las primeras causas de muerte en niños de 5 años, por lo que se deben tomar medidas para prevenirlos.

Algunos consejos para prevenir accidentes en el hogar

  • Evitar que estén en la cocina y mantenerlos lejos de objetos calientes, como son: ollas, jarras, comales, tinas, etcétera.


  • Tener cuidado con los cables que llevan electricidad y tratar de tapar los contactos con algún mueble u objeto.


  • Quitar de su alcance objetos de vidrio, porque se pueden cortar con ellos.


  • Proteger escaleras, ventanas y azoteas con barrotes o tablas.


  • Retirar objetos pequeños que puedan llevarse a la boca.


  • Acompañar al niño o niña a ir al baño, a bañarse y estar al cuidado de lo que hacen.


  • Evitar que abran o toquen las llaves de gas.


  • Evitar la cercanía de objetos que contengan líquidos calientes o hirviendo.


  • Retirar de su alcance cerillos y encendedores.


  • Guardar las medicinas donde no puedan agarrarlas.


  • Evitar poner líquidos tóxicos como gasolina, acetona, jabones limpiadores, en botellas de refresco; no dejarlos a su alcance.


  • Impedir que los niños y niñas toquen o jueguen con aparatos eléctricos.


  • Vacunar a los animales que viven en la casa, como gatos o perros, y mantenerlos aseados.
 
 
 
     
   
   
 
Los niños y niñas de seis años de edad
 

Desarrollo físico, confianza e independencia

A los seis años de edad el niño o niña tiene más dominio de su cuerpo, ha desarrollado más su inteligencia, habla mejor, hacen “mandados” sencillos, participan en las tareas del hogar por lo que es conveniente que se inicien de manera formal en la vida escolar y se sigan fortaleciendo los conocimientos, valores, hábitos y costumbres que benefician su salud y desarrollo y mejoran la convivencia familiar y social.

 
 
Lee en tu revista el artículo "Soy tu hijo".
 
 
 
 
• El crecimiento y desarrollo de las niñas y niños producen muchos cambios

Su cuerpo crece y cambia
A partir de los seis años de vida, aproximadamente, aparecen cambios importantes en el cuerpo y en la mente de los niños y las niñas: empiezan a caerse los dientes de “leche” y salen los permanentes y las primeras muelas.

Su inteligencia se fortalece
Los niños en esta edad reconocen la mano izquierda y la derecha; ordenan objetos por forma, tamaño y color, así como muchos acontecimientos como el día y la noche, hoy y mañana; lo que está arriba, abajo, adelante, atrás; y pueden iniciar el aprendizaje de las matemáticas, la escritura y la lectura. Socialmente han desarrollado valores que se reflejan en su comportamiento.

 
 
 
Los niños y niñas de los siete a los diez años

  • Preguntan sobre el origen, causa o explicación de las cosas y acontecimientos. Prestan atención a los demás y se mantienen atentos en lo que les interesa.


  • Distinguen lo que se les permite hacer y lo que no, adquieren y practican más hábitos; se responsabilizan de actividades sencillas, como hacer un mandado, tender su cama; preparan junto con sus padres la ropa que usarán el día siguiente; se vuelven más independientes; toman decisiones por sí solos.


  • Establecen relaciones de amistad, juegan en equipo y realizan trabajos de cooperación, como una pequeña tarea de investigación en la escuela.


  • Es la edad en que se cursa la educación primaria, por lo que en esta etapa la vida escolar adquiere gran importancia para ellos. Tienen interés por conocer cómo son y cómo nacen los animales, las plantas y el ser humano, cómo son y qué hacen las personas que viven en otros lugares.
  •  
    • El desarrollo sexual de los niños y las niñas

    Una parte muy importante del desarrollo de niños y niñas es lo relacionado con su sexualidad. Es común que niños y niñas toquen sus órganos sexuales, al igual que otras partes de su cuerpo, para conocerlos y por la sensación placentera que les produce. Reconocen la diferencia entre un niño y una niña, a veces hacen preguntas en relación con los órganos sexuales, de las personas adultas; sobre las relaciones sexuales y cómo nacen los y las bebés.

    La sexualidad es la forma de manifestarse y expresarse según su sexo. Tiene relación con su forma de ser, con sus emociones, actitudes, pensamientos y sentimientos, como el amor a sí mismos y a los demás.

    Los niños y las niñas expresan su sexualidad a través del juego, juegan al papá y a la mamá, al doctor, y se relacionan con otros niños y niñas de su edad y con las personas con quienes conviven. Por lo general hacen mejor amistad con los de su mismo sexo.

    Tratar a los niños y niñas con naturalidad y respeto en las expresiones de su sexualidad y brindarles comprensión y afecto, fortalece su desarrollo y crecimiento.

     
     
    • La curiosidad sexual

    Es común que a partir de los seis años los niños y niñas tengan juegos como decir que tienen novia, novio o que están enamorados, dibujar corazones o hacer “cartitas de amor”. Es natural, como manifestación de su sexualidad, que se sientan atraídos por otro niño o niña, o por alguien de más edad, que tengan curiosidad en saber cómo son los besos entre enamorados o que deseen ver el cuerpo desnudo de las personas del sexo opuesto.

    En esta etapa las personas adultas pueden hablar con los niños y niñas sobre sus inquietudes, con naturalidad y respeto sobre lo que sienten, sin negar o castigar sus sentimientos; explicarles con sencillez lo que es ser novios, cómo son los besos de los enamorados y todo lo que pregunten. Escuchar lo que les sucede, ayudarles a aceptar sus sentimientos y a solucionar sus dudas.

     
     
     
     
         

    Una forma de apoyar a los niños y niñas en su crecimiento físico y en el desarrollo de su inteligencia, es reconocer las características propias de su edad, para darles confianza en sí mismos, expresando reconocimiento a sus cualidades, logros y esfuerzos, así como aceptándolos y respetándolos como son, pero siempre orientándolos hacia el desarrollo de valores como el respeto, la comunicación afectuosa, la tolerancia y la dignidad humana.