Los niños y las niñas de los 18 meses a los 3 años empiezan a disfrutar de las historias y los cuentos, por lo que aquí le presentamos algunos para que se los cuente. Hágales cambios, póngales sonido o música, en fin, todo lo que se le ocurra, a quien se lo cuenta puede pedirle ayuda para hacerlo más divertido.

Los cuentos de Nunca acabar son para los niños y las niñas a partir de los 18 meses, les ayudan a desarrollar la memoria, el vocabulario y como son versos cortos de edad, pues les gustan porque se repiten.

  

En un charco había una mosca

En un charco había una mosca
y con la mosca un mosquito,
si no te has enterado 
te lo cuento despacito.
En un charco había una mosca
y con la mosca un mosquito,
si no te has enterado 
te lo cuento más bajito.
En un charco había una mosca
y con la mosca un mosquito,
si no te has enterado 
te lo cuento rapidito...



La gata que daba la lata

Esto era una gata que daba la lata te lo voy a repetir para hacerte reír.
Esto era una gata que daba la lata te lo voy a repetir para hacerte reír.
Esto era una gata que daba la lata te lo voy a repetir para hacerte reír...


José se llamaba

José se llamaba el padre, Josefa la mujer y al hijo que tuvieron le pusieron José, se llamaba el padre, Josefa la mujer...


Hace muchísimos años...

Hace muchísimos años cuando los circos llegaban a la ciudad un payaso, en una moto
se metió por un charcal y todo el que lo veía no tenía, más que contar que hace muchísimos años...

En el corral había un pollo...

En el corral había un pollo
que no podía caminar
y la gallina le puso
una pata de cristal
La gansa le contó a todo,
a todo el reino animal
que en el corral había un pollo
que no podía... 

 



Del libro Inés Cuevas. Tejamos rondas. Atemos risas,
Mérida, Venezuela, Fondo Editorial La escarcha Azul, 1996.
Cuentos de Nunca Acabar, [en línea], <El huevo de chocolate. Com/cuentos/cuentos9.htm>